Visibilidad

No es fácil, no es nada fácil ser "visible", depende de cada persona y de sus circunstancias. Soy la primera que digo que si mi padre o mi madre vivieran, yo no creo que estuviera escribiendo hoy aquí.

"Salir del armario" es un proceso, cada cual va a su ritmo y hay que respetar. Habrá gente que diga que no tuvieron que "salir del armario" porque nunca estuvieron dentro, pues que suerte.

Cuando yo estaba, encontrándome, aceptándome y queriéndome a mi misma, o sea en "período psicóloga", mi madre se daba cuenta de que algo me pasaba, de que yo no estaba bien, mi estado de ánimo se reflejaba en mi cara.

Un día que estábamos comiendo las dos solinas, me dijo: "Isina ¿Por qué tienes esa cara tan triste? Yo quiero que seas feliz."

Yo en ese momento quise darle un abrazo y decirle que me había enamorado de una chica, pero no pude, me levante y me fui a mirar por la ventana. Sé que si se lo hubiera dicho, lo habría aceptado y me habría dado un abrazo, abrazo que yo tanto quería y necesitaba, pero mi madre era mayor y estaba muy delicada de salud y sabía que se iba a preocupar por el que diría esta sociedad, tan cerrada de mente, y yo no quería que esa preocupación le afectará a su salud.

Poco tiempo después, se murió, sin poder despedirnos, sin darnos ese abrazo.

Pero le haré caso, voy a ser FELIZ.